"Cada hoja que le caía por la cara ahondaba su tristeza. No volvería a ver cada una de las hojas que dejaba atrás. le caían por el rostro como velos, algunas ya amarillas, con venas como delgados huesos atravesados por los rayos del sol. Había decidido seguir cabalgado porque no podía volvery el mundo ese día era tan agradable como ninguno. Cabalgaba hacia su muerte."
Un golpetazo de realismo en pleno sur de Estados Unidos, algo a lo que McCarthy nos tiene acostumbrados y de lo que podemos ser testigos en esta protonovela, que junto a la anterior, La oscuridad exterior, preparan el terreno para el desarrollo temático en novelas subsecuentes como Suttree y de forma más directa Meridiano de Sangre. Hay mucho de esta última en Hijo de Dios. McCarthy nos compele a señalar con el dedo a un hombre acusado falsamente de violación. Lester Ballard huye alejándose, aislándose hasta vivir bajo tierra mientras se desvelan , en su divagar, sus más oscuros instintos.
La autodeterminación de Ballard por existir al margen de una sociedad opresora, condenatoria y que salvaguarda la opinión individual bajo una opinión colectiva apoltronada para eludir la exposición de las propias miserias, es el hilo conductor del deambular por páginas y corresponde al camino físico y psíquico del protagonista. Huérfano, sin techo, vulnerable, cebo fácil, Ballard debe huir para preservar su vida sin saber que cada paso será uno más a su propia degradación personal. A cada paso de Ballard McCarthy nos desafía y nos remueve la conciencia, Ballard se va animalizando, alejándose de su humanidad hasta llegar a habitar una cueva. Ballard-víctima se va alejando de la sociedad-verdugo para convertirse él mismo en verdugo. A través de episodios sórdidos vamos asistiendo, a través de una prosa que reproduce desde el lenguaje más coloquial hasta la poesía en prosa más exquisita, a la transformación del protagonista mientras trata de sobrevivir a la intemperie.
Es, por lo tanto, un relato sobre la perversidad implantada, quizás congénita, que se genera y se desarrolla cuando el vulnerable es aislado de la sociedad. En ocasiones, Ballard intentará, aunque no de la manera más hábil, conectar con individuos puntuales siendo siempre rechazado. McCarthy nos da las dos caras de Ballard: un ser violento, despiadado, con tendencias sexuales degeneradas y sin embargo, nos desafía en los episodios que relatan el deseo de integración y sobretodo, a través del título del libro a comprender que, al fin y al cabo, Ballard, por despreciable que pueda llegar a ser, es un hijo de Dios.
¿Recomendarla? Por supuesto, por dura y cruda que pueda resultar. Apunta a un lado al que no queremos mirar, nos hace descender de nuestro convencimiento ético universal sobre el bien y el mal para tenderle la mano a otro hijo de Dios, para intentar comprenderlo, para, sin moralismo explícito, llegar a ser más humanos.
Hijo de un dios menor este Ballard por lo que intuyo. Esa rasgo personal e intransferible en el carácter del protagonista, individuo que intenta sobrevivir alejándose de la sociedad mientras se animaliza, me ha recordado mucho a Suttree. Y esa novela me gustó mucho…
ResponderEliminarCreo que te comenté en otro lugar que tengo anotada “Meridiano de sangre” para el 2014, ahora también apunto esta.-
Leí La carretera y me gustaría seguir probando con el autor. Este podría se uno de los títulos.
ResponderEliminarEste autor me impactó con su La carretera. Me pareció como dices de este libro dura y cruda. Una historia en que un hijo no tiene ni nombre porque el mundo es tan salvaje que es mejor no encariñarse y no personalizar no puede más que darnos un buen golpetazo para que despertemos.
ResponderEliminarTengo pendiente volver a leer este autor, aunque no se si será con este título visto lo que recuerdo en realidad a La carretera.
Un saludo.
En definitiva el proceso de creación de un monstruo individual por un monstruo colectivo. Una gran reflexión, me gusta.
ResponderEliminarUn abrazo
No sé por qué pero con este autor no termino de animarme, prefiero conocerle por las películas, así que de momento no apunto este título. Un beso
ResponderEliminarTú no te andas con zarandajas ¿eh? ¡Menudos libros traes a veces! XD. Quiero leer el autor pero después de leerte decir que es dura y demás... uf no sé yo.... Mejor algo más ligerito para las semanas próximas. Besos
ResponderEliminarYa tengo separado un libro de McCarthy, en cualquier rato lo leo, me gusta tu entusiasmo por este autor. Me gusta lo de retratar a alguien reprobable en general y como la sociedad influye en él negativamente. Me gusta lo que has escrito, es muy sustancial. Que acabe con dos libros, voy por McCarthy. Un abrazo.
ResponderEliminarVaya. Menudo puñetazo en el estómago te has llevado con esta lectura. Yo me la apunto por ser tú quien la recomienda pero para después de Navidad.
ResponderEliminarBesitos
Lo que pasa es que a mí estas novelas no terminan de cuajarme. La dejo en la reserva y si me decido, te comento. Besos.
ResponderEliminarQue no diga nada al respecto de las reseñas no quiere decir que no piense que son estupendas siempre, sino que no quiero ser repetitiva. Por encima de eso, sobre todo valientes, no solo por las propuestas en sí, sino por lo que nos dicen, no te lo pones fácil, no nos lo pones fácil y eso lo hace todo más interesante. No cambies.
ResponderEliminarY ahora McCarthy, me siento mal, es inevitable llegar al final del año y echar la vista atrás y ver en qué has andado, que no es que haya estado mal, sino que me faltan autores con los que pretendía ponerme, por ejemplo, McCarthy, que solo leí dos este año y ni si quiere he reseñado uno, porque volviendo al punto inicial, reseñas de ciertas obras a mi me parecen valientes.
Un beso y buena semana
Creo que ya te he comentado en otras reseñas que no he leído nada de este autor aún y me apetece probar, aunque no tengo muy claro con qué resultado. La novela que más me apetece es La carretera y ya luego me animaría con otras si veo que me gusta su estilo
ResponderEliminarbesos
¡¡Hola Yossi!!
ResponderEliminarTengo apuntadas varias novelas de Cormac, desde las anteriores reseñas que hiciste, ahora me falta decidir por cuál empezar ;)
Besos y buen inicio de semana.
No he léido a este autor pero tengo pendiente en la estantería "La carretera". A ver si la despacho en breve y continúo con otras obras que lo que cuentas en esta reseña me gusta mucho.
ResponderEliminarUn abrazo.
McCarthy siempre desafia y reta al lector. Me gusta, no busca complacer ni que la lectura sea cómoda, aunque nos la facilite. Quiero leer TODO de este autor (ambiciosa que soy).
ResponderEliminarBesos
No he leído mucho de este estilo, como mucho a Steinbeck con La Perla y Las Uvas de la Ira... Al menos el escenario es más o menos parecido, el desengañado sur de EEUU, maltratado por los norteños y por la historia escrita de los vencedores.
ResponderEliminarA ver si me atrevo con algo de este autor que, con sinceridad, creo que me supera y que tiene más literatura de la buena de la que voy a ver en toda mi vida jajajaja ;)
Un besito!!!
Has dicho justo lo que me gusta de leer a McCarthy, naturalezas humanas, tal vez no las mejores, pero naturalezas. Como las de cualquiera.
ResponderEliminarMe gustó el libro que nos traes, no me he tropezado aún con ninguna letra de McCarthy
Besos
Aún no me he estrenado con este autor a pesar de que tengo La carretera esperando desde... Ni me acuerdo. Así que antes caerá este libro que tengo en la estantería y posiblemente después éste, que me dejas con ganas.
ResponderEliminarBesotes!!!
Me propuse descansar un poco de este autor por el tema de la crudeza y realismo, pero gustar me gusta, y bastante, tengo ya varios títulos para cuando lo retome, y me llevo este apuntado, aunquie quizás sea demasiado fuerte para mi reencuentro :-) Un besote!
ResponderEliminarLo poco que he leído de este hombre me ha encantado, así que este caerá seguro =)
ResponderEliminarBesotes
Compartimos admiración con McCarthy, así que también la tengo en el punto de mira. Aunque la próxima será, creo, esa "Oscuridad exterior" y quizás "Sutree", que también tengo esperando.
ResponderEliminarMe encanta McCarthy y me encantan estas novelas que, a parte de traernos una historia, nos hacen reflexionar, mirar un poco más allá de lo aparente o de lo que los muros de la ética o lo aceptado nos separan.
Un abrazote, Yossi!
Que buena reseña Jose, es de las que gustan, porque vas asintiendo con la cabeza, abriendo los ojos y aclarando la mente, es lo que a uno le ha quedado de la novela pero no ha podido expresar.
ResponderEliminarCreo que, una vez pasado el tiempo, tengo que asumir que fui injusto con esta novela, que tiene más de lo que aparenta una primera lectura.
Te sigo cuando puedo...
Un abrazo Jose :)
Ah, pero qué maravilla, esto de un Frankenstein que así, sin deformidad física, obligue al lector a reconocerlo como otro ser humano.
ResponderEliminarApuesto que es más difícil hacerlo que decirlo.
Me gusta la idea.
Besos!
Ballard me ha conmovido, con ese interés por encajar y el rechazo le hace más oscuro y salvaje. Siempre es difícil hacerse hueco en un pequeño mundo y el sur de USA, me temo, debe ser sectario a tope.
ResponderEliminarOjalá que huya, porque hay muchas formas de destruir a un hombre y una, es romperte el alma en pedazos.
Un beso
(*si por un casual acaba bien... Por fa, Yossi, házmelo saber. Que me quedé un poco mustia :S )
Besos
Leí La carretera y no conseguí adaptarme al estilo del autor y esta puede ser una buena opción que la crudeza no me asusta ;)
ResponderEliminarUn beso!
McCharthy es ya uno de mis escritores favoritos y pienso leerlo todo, así que esta obra la leeré sin duda.
ResponderEliminarLeo tu estupenda entrada con Eva Cassidy y su Songbird de fondo, no puede haber mejor fondo para leer a McCharthy y tus reseñas.
Un abrazo!!
Es imposible definir una novela de McCarthy diciendo "bella",pero sí "duras" y "descarnadas", que al fin producen el mismo placer masoquista tal vez, al leerlas como si fueran "bellas". (se entendió lo que quise decir? jeje) Un beso Jose y voy a buscarlo que éste me falta.
ResponderEliminarAl final otro año que se acaba y yo sin estrenarme con este autor... mecachiisss!! :P no sé por qué lo voy relegando y relegando si en realidad tengo ganas de ponerme con él...
ResponderEliminarun abrazo!
Completísima reseña que me anima aún más a estrenarme con este controvertido autor: creo que a pesar de la dureza de sus relatos puede resultar una experiencia lectora y estética sublime. 1beso!
ResponderEliminarAun no he leído nada de Cormac. Quizás en breve lo haga. Rotunda tu reseña, como siempre, Yossi! Un fuerte abrazo.
ResponderEliminarSiempre siento cierta nostalgia cuando leo una reseña de una novela de McCarthy; de cierta forma, me cuesta saber que ya sólo me quedan unas pocas novelas por leer...y, seguramente, todas mucho más densas que el libro que nos traes hoy aquí.
ResponderEliminarEntusiasmada por esta lectura, me he lanzado con el Guardián...pero no es lo mismo; la mayor parte del tiempo me sentía perdida...o el o yo estábamos completamente a la deriva. Buen finde :)
McCarthy, qué tipo.
ResponderEliminarNo he leído nada de él. Pero todo el mundo parece alabarlo y amarlo, por muy árido que sea el suelo que pisa. Creo que empezaré por Suttree, que me llama la atención.
Ya te diré qué tal. O ya me leerás. O ya veré si salgo vivo de la América Profunda y de su mala sangre.
Little bye!
Leer no he leído nada de McCarthy, aunque vi la peli "La carretera" que terminó defraudándome, quizás porque me esperaba más.
ResponderEliminarTengo pendiente algo suyo, pero tengo tantos autores pendientes...
Besos y ¡Feliz Navidad Yossi!!!
Todavía no me he estrenado con este autor, pero no creo que esta sea la obra indicada para hacerlo. Estoy en pleno conflicto ético-moral....
ResponderEliminarPero vamos, que será por obras para elegir!
Muchos besos y felices fiestas!
Cita
Acabo de tener un 'déjà vu' al leer esta reseña, como si ya la hubiese leído antes. ¿Sería la de otra obra de este autor? ¿Sería en otra vida? No sé. Tengo decidido leer algo de este autor en 2014. La carretera y No es país para viejos no, que ya he visto las películas y no me apetece volver con esas historias . ¿Este, quizá? Puede. Ya te diré...
ResponderEliminarUn abrazo,
McCarthy es siempre un valor seguro de buena literatura y de historias duras. Tomo nota para un futuro.
ResponderEliminarSaludos.
No sé si llegaré. Me tientas. Pero tengo libros hasta en el armario de la ropa. McCarthy desconocido para mí antes, pero desde que os rondo, es de lo más conocido. Intentaré hacerle un hueco en el armario, jeje
ResponderEliminarSon lecturas quizás demasiado fuertes para mi estado de animo y reflexión ahora mismo pero si es verdad que tengo que leer algo de este autor en algún momento
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